Huyeron mientras el guardia en turno se ausentaba para comer y dejaron un mensaje que leía «muy fácil»
Esta foto obtenida por The Associated Press el viernes 16 de mayo de 2025 muestra una abertura dentro de una celda en el Centro de Justicia de Orleans, en Nueva Orleans.
AP
Diez hombres escaparon de una cárcel en Nueva Orleans el viernes por la noche en una audaz fuga nocturna, saliendo por un agujero detrás de un inodoro y escalando una pared mientras el único guardia asignado a ese módulo de celdas se encontraba ausente para ir a buscar comida, informaron las autoridades.
Siete de los fugados, algunos acusados de asesinato, siguen prófugos tras la fuga, que, según la alguacil local, pudo haber contado con la ayuda de personas dentro del propio departamento.
Imágenes de vigilancia, compartidas con los medios en una conferencia de prensa, mostraron a los reclusos corriendo fuera del recinto —algunos vestidos con ropa naranja y otros de blanco. Escalaron una cerca utilizando mantas para evitar cortarse con el alambre de púas, y algunos fueron vistos cruzando una autopista cercana e ingresando a un vecindario.
Una fotografía obtenida por Associated Press muestra el agujero detrás del inodoro por donde escaparon los reclusos. Encima de la abertura, hay mensajes garabateados como “Too Easy LoL» con una flecha apuntando al hueco.
La ausencia de los diez hombres —que también aprovecharon fallas estructurales que han sido señaladas desde hace tiempo— no fue notada durante horas. No fue sino hasta un conteo de rutina por la mañana, más de siete horas después, que se detectó la fuga.
Funcionarios de la Oficina del Alguacil indicaron que no había ningún oficial en el módulo de celdas donde estaban los fugitivos. Solo una técnica civil que observaba el área, pero había salido a buscar comida.
Tres recapturados, siete siguen prófugos
Poco después de la fuga, Kendall Myles, de 20 años, fue capturado tras una breve persecución a pie en el Barrio Francés. Ya había escapado previamente en dos ocasiones de centros de detención juvenil.
Para la tarde del viernes, otros dos fugitivos fueron recapturados. Robert Moody, de 21 años, fue hallado en Nueva Orleans tras una pista enviada a Crimestoppers, y Dkenan Dennis fue detenido cerca de la autopista Chef Menteur, según la fiscal general de Luisiana, Liz Murrill.
Siete permanecen prófugos, informó la policía estatal el sábado por la mañana. Los reos recapturados fueron trasladados en helicóptero a una prisión estatal fuera de Nueva Orleans. La búsqueda sigue activa con la colaboración de agencias locales, estatales y federales trabajando sin descanso.
Alguacil culpa a cerraduras defectuosas y posible complicidad interna
La alguacil del distrito de Orleans, Susan Hutson, dijo que los reclusos lograron escapar del Centro de Justicia de Orleans debido a “cerraduras defectuosas”. Agregó que ha planteado repetidamente la necesidad urgente de fondos para arreglar la infraestructura deteriorada, incluso esta misma semana.
Hutson también mencionó que hay indicios de que empleados de su propio departamento ayudaron a los reos:
“Es casi imposible —no completamente, pero casi— escapar de esta instalación sin ayuda”, declaró, señalando que actualmente hay 1,400 personas recluidas en el centro.
Los presos forzaron la entrada a una celda con el agujero alrededor de la 1 a.m. Según un comunicado, al menos una de las barras de acero que protege las instalaciones de plomería “parecía haber sido cortada intencionalmente con una herramienta”.
Una vez fuera del edificio, los fugitivos se deshicieron de sus uniformes carcelarios. Aún no está claro cómo algunos consiguieron ropa común tan rápidamente.
Las autoridades no se percataron de la fuga hasta las 8:30 a.m. Inicialmente, se creyó que habían escapado 11, pero luego se aclaró que uno de ellos estaba en una celda diferente.
Tres empleados han sido suspendidos mientras se investiga. No se ha confirmado si alguno de ellos ayudó en la fuga, ni si el guardia que salió a buscar comida está entre los suspendidos.
¿Quiénes son los fugitivos?
Los fugitivos tienen entre 19 y 42 años.
Uno de ellos, Derrick Groves, fue condenado en 2023 por dos cargos de asesinato en segundo grado y dos cargos de intento de asesinato, por su participación en un tiroteo durante el Mardi Gras de 2018. También enfrenta una acusación por agresión contra un empleado carcelario. Las autoridades advirtieron que podría intentar localizar testigos de su juicio.
Otro, Corey Boyd, se ha declarado no culpable de un cargo pendiente por asesinato en segundo grado.
Hutson aseguró que su oficina trabaja con agencias estatales, federales y locales para recapturar a los fugitivos.
Según Bryan LaGarde, director de Project NOLA, organización que opera más de 5,000 cámaras en Nueva Orleans, se usó tecnología de reconocimiento facial para identificar y capturar a dos prófugos. “Caminaban abiertamente por la calle, con la cabeza baja y mirando sobre el hombro”, dijo.
Críticas severas a las autoridades carcelarias
El fiscal de distrito, Jason Williams, calificó el hecho como “un fracaso total en las responsabilidades más básicas de un alguacil o administrador de cárcel”. Denunció el retraso de varias horas en notificar a las autoridades y al público.
La fiscal general, Liz Murrill, calificó la fuga como “inaceptable” y dijo que contactó a estados vecinos para alertarlos. La jefa de la Policía de Nueva Orleans, Anne Kirkpatrick, afirmó que trabajan junto al FBI y los U.S. Marshals para capturar a los prófugos y proteger a testigos o posibles víctimas. Una familia ya fue retirada de su hogar por seguridad.
“Si alguien está ayudando u ocultando a estos fugitivos, será acusado”, advirtió Kirkpatrick.
Una cárcel en crisis prolongada
La cárcel de Nueva Orleans lleva más de una década bajo supervisión federal debido a sus malas condiciones. En 2015 se inauguró el Centro de Justicia de Orleans para reemplazar la antigua prisión, que también tuvo fugas y muertes bajo custodia.
Un juez federal declaró en 2013 que la antigua cárcel era un entorno inconstitucional para los reclusos. Actualmente, el centro opera con apenas 60% del personal necesario.
Bianka Brown, directora financiera del departamento del alguacil, dijo que no cuentan con contrato de mantenimiento para arreglar problemas como puertas rotas y cerraduras defectuosas.El jefe de correccionales, Jay Mallett, explicó que la cárcel alberga a numerosos internos peligrosos sin el entorno de seguridad restrictiva que requieren. Ya estaban en proceso de transferir a varios a instalaciones más seguras.