
Tras el asesinato de Roberto Carlos Ortiz Matos (alias «Pescao»), de 42 años, en un bar de Corozal, su madre, Mirta Matos, expresó el profundo dolor que le dejó la pérdida de su hijo, asegurando que “no habrá quien me lo quite por el resto de mi vida”.
«Esa persona que lo mató no sabe cuánto sufrimiento me ha causado, pero mi fe en Dios es muy grande y solo mi corazón está destrozado. Dios me tiene agarrado para mantenerme de pies. Algún día Dios me enseñará a vivir con este dolor», manifestó Matos.
Antes del sepelio de su hijo, admitió no saber cómo enfrentaría ese momento, pues “solo una madre que ama a sus hijos lo entiende”.
«Roberto Carlos, hijo de mi alma, no habrá un momento en que no te llore. La diferencia del llanto de hoy es que hoy te lloro a gritos. Pero, el de mañana, será en silencio. Siempre voy a pensar en ti para no olvidarte. Te amo, y, te amaré siempre», aseveró Matos.
Por su parte, su hija Mariangelis Ortiz Santiago comentó en redes sociales que “ojalá y nunca tengan que pasar por algo parecido, porque esto no es fácil”.
«Mi corazón me duele tanto», agregó.
Mientras tanto, Marian Santiago Rivera, madre de Mariangelis y expareja del fallecido, también reaccionó para dejar claro que no tuvo ninguna relación con el crimen.
«No tengo un car**o que ver en todo lo que pasó ayer, ni siquiera estaba en Corozal durante todo el weekend. El que me conoce sabe que estuve en la competencia de mi hija», declaró Santiago Rivera, horas después del asesinato.
Esta aclaró que a ella nadie la está buscando. «no soy blanco ni tarjeta de nadie y nunca compartí con ellos».
«Es una pena lo que está pasando. Me duele mucho, es el papá de mis hijos, una amiga y su esposo. Solo le pido a Dios deje con vida a mi amiga, una mujer trabajadora y con tres hijos. Y le doy gracias a Dios por que hay cámara y verán que nunca estuve ahí para que dejen de hablar mi**da y compartir un video e información falsa», sostuvo.
«Bajo ese cielo todo se sabe», concluyó.
El velorio de Ortiz Matos se llevó a cabo el pasado jueves en la funeraria Hernández de Corozal, y su sepelio tuvo lugar el viernes en el Cementerio Nuevo Municipal del mismo municipio.