Fianza millonaria contra uno de los distribuidores de fentanilo en Arecibo al sapo no se le determinó causa

Christopher (Yayo) Sánchez Villanueva, de 22 años de edad, uno de los dos individuos arrestados el viernes en posesión de armas y de una gran cantidad de fentanilo y sospechoso de ser uno de los distribuidores de narcóticos en el sector El Coto, en Arecibo, donde la letal droga sintética cobró 11 vidas la semana pasada, fue ingresado anoche en la cárcel cuando no prestó la fianza de $1,450,000 que le señaló el juez Francisco Santiago.

Sin embargo, el mismo juez no determinó causa para arresto contra el segundo arrestado, identificado como Jonathan (El Sapo) Rodríguez Ruiz, de 34 años de edad, a quien en un allanamiento en su hogar en el sector Los Caños, los agentes de Inteligencia y del Plan Integral le ocuparon dos pistolas, dos libras de marihuana, 467 bolsitas con esa droga, así como cinco gramos de fentanilo y 43 bolsitas con fentanilo listas para la venta, entre otra evidencia.

El juez no determinó causa en una vista a la que no acudió fiscal alguno, y en la cual su abogado argumentó que no habían presentado como prueba el inventario de lo ocupado en el allanamiento, según se informo.

Se espera que el caso sea sometido próximamente en alzada, mientras se aguarda por una determinación de la Administración para el Control de Drogas (DEA, en inglés), que tomaron jurisdicción en la investigación en torno a las 11 muertes ocurridas desde finales de la semana pasada en este municipio, aparentemente provocadas por fentanilo.

“Yayo” fue arrestado por los agentes que buscaban al fugitivo federal apodado “Naná”, que se escondía en un apartamento en el edificio A-1 del Residencial Manuel Zeno Gandía.
Según las autoridades, en el lugar, usado como laboratorio, se ocupó un rifle de asalto AR-15, con cargadores, una pistola Glock, más de 200 balas y alrededor de 18 bolsas plásticas de seis pulgadas por seis, conteniendo mezclas de fentanilo con cocaína y heroína.

“Naná” no estaba en el lugar.

Los resultados de las autopsias arrojaron que en seis de los casos las muertes fueron provocadas por fentanilo mezclado con cocaína; otros dos con fentanilo y xilacina (anestesia de caballo); otro con una mezcla de las tres sustancias y uno por sobredosis de cocaína.

Los agentes Pedro Ramos y Wilfredo González Álvarez, junto al sargento Julio Castillo de Jesús y el teniente José Román Vega, director de Inteligencia en esta región, han tenido a su cargo las dos intervenciones.

Se aguardan por los resultados del laboratorio del Instituto de Ciencias Forenses para conocer la cantidad exacta del fentanilo en piedra con un peso aproximado de un octavo de kilo hallado en el laboratorio clandestino en el Residencial Manuel Zeno Gandía, así como el peso de las otras drogas decomisadas.

La Policía continúa en un plan de vigilancia en el sector El Coto, procurando frenar la venta de la fatal droga, que además de las muertes provocó que alrededor de 10 usuarios fueran hospitalizados.