Colombia
Hallan con vida a cuatro niños perdidos hace 40 días en la selva colombiana Guaviare

El menor tenía solo 11 meses, su madre duró 4 días con vida.El hecho de que sobrevivieran a un accidente aéreo resultaba casi inverosímil, pero aún más que solos, sin ayuda de nadie, pudieran mantenerse con vida durante todo este tiempo en una selva en la que llueve 16 horas al día y que está sumida casi en la oscuridad por el follaje.
Los militares colombianos los sacaron de la selva con un helicóptero que no podía posarse en tierra y aguardaba a 60 metros de altura, en el aire.
Los subieron hasta el aparato con arneses y una polea. La altura de los árboles y la oscuridad dificultaron la operación.
Los niños parecían estupefactos, como si estuvieran viviendo un momento irreal. Las autoridades aseguran que se alimentaron asiduamente con los kits de supervivencia que los rescatistas lanzaban desde el aire.
El 1 de mayo, la avioneta en la que viajaban con tres adultos, entre ellos la madre, cayó al vacío en mitad de la selva amazónica, sobre el río Apaporis.
El piloto avisó a la torre de control de un fallo del motor antes de perder altura de forma brusca, momento en el que trató de amerizar en el río, pero se quedó sin capacidad de vuelo y se estrelló contra unos árboles.
No se supo más de todos los ocupantes hasta 17 días después, cuando unos rastreadores indígenas encontraron la avioneta siniestrada.
Dentro estaban los cadáveres de los tres adultos, pero no había rastro de los niños. Enseres y ropa que se encontraron en los alrededores dieron esperanzas a las autoridades de que los niños, pese a todo, se encontraban con vida.
Desde ese día, Petro dio la orden de que un gran dispositivo militar, en cooperación con comunidades indígenas, encontraran a los niños.
112 militares de las fuerzas especiales y 72 indígenas se dedicaron día y noche a tratar de dar con ellos.
Los niños abordaron esa avioneta para encontrarse con el padre biológico de los dos pequeños, que había huido de Araraucara, donde vivía toda la familia.
Manuel Ranoque había sido amenazado de muerte por uno de los grupos guerrilleros que hay en esa zona selvática y se refugió en otro lugar.
Su desaparición fue un misterio que no se evaporó hasta que llamó semanas después a su casa y les pidió a todos que fueran a su encuentro.