
El ángulo del incendio de la guagua Ford F-150, es uno de varios sobre los cuales los investigadores de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) procuran abundar para esclarecer el asesinato
Tres horas y 23 minutos después del asesinato de Kevin Pacheco Hernández, quien llevaba 6 años jubilado del Ejército donde ostentó el rango de capitán, la guagua de un familiar que vive cerca de la casa del occiso en la Avenida Constancia, en la urbanización Villa del Carmen, fue incendiada.
El ángulo del incendio de la guagua Ford F-150, es uno de varios sobre los cuales los investigadores de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) procuran abundar para esclarecer el asesinato
Pacheco Hernández había compartido con familiares y amigos en la noche del viernes en el negocio La Barrita Sport Bar, en la avenida Hostos, y antes de la medianoche había regresado en su automóvil a su hogar en una urbanización cercana. Estando en su hogar recibió una llamada a su teléfono celular en la que un primo que seguía en el negocio lo llamó, aparentemente porque tenía problemas. Se vistió y arrancó en su motocicleta, llevando una pistola Taurus calibre 9 mm., una de las varias armas para la que tenía licencia.
Sin embargo, el primo dijo que los investigadores que lo llamó, pero que fue para otros asuntos y que al ocurrir los hechos a la 1:06 de la madrugada del sábado se encontraba en otro lugar
Los agentes habían establecido que Pacheco Hernández llegó a las 12:55 de la madrugada del sábado, cuando regresó al negocio, La Barrita donde aparentemente se suscitó una discusión con unos individuos que no habían sido identificados. Pacheco Hernández caminaba hacia la avenida Hostos, cuando recibió alrededor de 8 balazos, uno de ellos en la cabeza y otros en la espalda. Murió en el acto. No tuvo oportunidad de defenderse con la pistola Taurus que portaba.
La Policía fue informada del incendio de la guagua a las 4:29 de la madrugada y la querella se rindió como “otro servicio” por lo que no fue referida de inmediato a la División de Explosivos. Los agentes de Explosivos comenzaron a investigarla a las 3:00 de la tarde del sábado y no lograron contactar a la dueña registral ni a la persona que usaba la guagua
Los agentes Elvin Rosado Negrón y José Alvarado Collazo, en unión al sargento Eddie Torres y al teniente Félix Guilbe, de la División de Homicidios del CIC, quienes iniciaron la investigación, junto a otros agentes, ocuparon ayer las cámaras de seguridad de negocios aledaños y hoy será examinado el contenido para determinar cuál fue el vehículo en que huyeron los responsables del asesinato.
Las cámaras de seguridad de La Barrita llevaban tiempo desconectadas