Autoridades no descartan que bailarina dio muerte a su pareja y luego se privó de la vida.

Los investigadores del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Carolina solicitaron que peritos del Instituto de Ciencias Forenses (ICF) hagan un examen minucioso de la escena en la que fueron hallados ayer los cadáveres de bailarina ‘pole dancing’ Jada Waldmann (alas «Kitty»), de 22 años de edad y residente del estado de Indiana, y de su pareja, el masajista José Fernando Rosa Rodríguez, de 27 años y residente de Gurabo, ante sospechas por los patrones de sangre y las heridas que presentaban de que fuera ella quien le disparó al hombre y después se privó de la vida en el apartamento en que convivían en la urbanización Villa Fontana, en Carolina.

El arma hallada en la escena, una pistola FN calibre 9mm., está registrada a nombre de Rosa Rodríguez. La misma quedó entre los cadáveres. En la escena se ocuparon dos casquillos calibre 9mm.

Aunque los cuerpos estaban empezando a descomponerse y tenían ambos abundante cabellera, da la impresión a los investigadores de que el hombre recibió un balazo en la cabeza no típico con un suicidio y el de ella aparenta ser una típica herida suicida.

Nadie los oyó discutir, pero aparentemente el sábado algunos vecinos oyeron dos disparos. Fue una amiga de ella, también estadounidense y bailarina exótica en un club en Santurce, que insistió desde la mañana de ayer que Jada estaba desaparecida, que no contestaba el teléfono y que su Toyota Camry estaba estacionado frente al apartamento en la esquina de las calles San José y Parque Rosaleda, en la urbanización Villa Fontana.

Los agentes de la Uniformada dieron con el automóvil de la joven tras las insistencias de la amiga y a media mañana de ayer se acercaron a la casa y observaron los cadáveres a través de las celosías de las ventanas. De la casa emanaba un fuerte olor fétido.

Los agentes entraron a la casa a eso de la 1:30 de la tarde. Agentes de Rescate llegaron a la casa para forzar la puerta, pero no fue necesario al hallarse sin seguro. Todo estaba en orden.

La amiga no sabía del paradero de Jada desde el sábado por la noche. Un equipo de agentes del CIC de Carolina, bajo la dirección de la inspectora Mabel Oliveras, llegaron a la escena.

Las autoridades se comunicaron con familiares de la joven, quienes viajarán a Puerto Rico para hacer la identificación oficial del cadáver. También se comunicaron ayer con familiares del masajista.

Una vez se concluyan los análisis y las autopsias se determinará si fue un feminicidio o si fue ella la autora de la muerte del masajista, como se sospecha.